Pitágoras: "Una bella ancianidad es, ordinariamente la recompensa de una bella vida."

Prof. Dra. Adela Beatriz Kohan

Psicogerontóloga, Psicogeriatra y Logoterapéuta

Alfredo Bufano 3189
Castelar, Prov. Buenos Aires
Argentina
Teléfono: 4624-7678 - Cel 011 15-5888-1350

adelakohan_69@yahoo.com

contador de visitas  Visitas a la web

"Se debe fomentar el pensamiento positivo sin dejar que factores como la ansiedad, la depresión o el miedo irracional interfieran en el quehacer cotidiano de los adultos mayores, el envejecimiento no tiene por qué ser estresante"

“Las Personas Mayores son la memoria de un pueblo y maestros de la vida. Cuando una sociedad no cuida a sus ancianos niega sus propias raíces y simplemente sucumbe”

Escuela de Ciencias del Envejecimiento

Colaboraciones

La vejez en las Américas

11.07.2014 23:42
Elementos: 1 - 3 de 14
1 | 2 | 3 | 4 | 5 >>

Os puede interesar

Desde los ámbitos científicos la respuesta es definitivamente no, la obesidad no es saludable aunque un 25% de los sujetos que la sufren no padecen...
No existe una cura definitiva para la enfermedad de Parkinson (EP) siendo ésta, crónica y progresiva. Afecta a la respiración, al equilibrio, al...
El accidente isquémico transitorio es un accidente cerebrovascular de tipo isquémico Se produce por la falta de aporte sanguíneo a una parte del...
Elementos: 10 - 12 de 24
<< 2 | 3 | 4 | 5 | 6 >>

Anciano ¿frágil o vulnerable?

12.07.2013 21:11

“Para sobrevivir, debemos ser capaces de aventurarnos a senderos desconocidos”

La Costumbre. Alberoni

Debemos, desde un inicio, marcar la diferencia que existe entre vulnerabilidad y fragilidad.

  • Vulnerabilidad: es la cualidad que permite que algo o alguien sea lastimado o herido. Se aplica a una persona o grupo según su capacidad para prevenir, resistir y  sobreponerse de indeterminado impacto. Las personas vulnerables son las que perdieron esta capacidad,  o  nunca la tuvieron desarrollada. La vulnerabilidad puede estar dada por condiciones, físicas, psicológicas sociales y culturales.

Etimología de la palabra “vulnerabilidad”:

Vulnus: herida

Ablis: posibilidad

  • Fragilidad:  es la cualidad de las cosas que permite que se debiliten o dañen con facilidad. Cuando hablamos de fragilidad debemos entender que no se está mencionando la incapacidad.

Causas importantes de incapacidad son:

  • Inmovilidad
  • Caídas frecuentes
  • Demencia
  • Depresión
  • Incontinencia esfinteriana
  • Infecciones
  • insomnio
  • Deprivación  sensorial (dificultades de visión, oído, gusto, tacto y tacto que contribuyen al aislamiento)
  • Constipación
  • Inmunodeficiencia
  • Malnutrición
  • Iatrogenia

En Israel agregan a éstas:

  • Viudez reciente
  • Desdentado total reciente

Consideraciones a tener en cuenta respecto del “anciano frágil”

Podemos incluir a los siguientes como factores que pueden predecir fragilidad:

  • Padecer enfermedades crónicas  o discapacitantes;  deficiencias sensoriales; alteraciones de la marcha y el equilibrio, falta de fuerza en miembros inferiores y osteoartropatía en los mismos.
  • Enfermedades de los pies.
  • Presencia de síndromes geriátricos, ellos son las cuatro “I” de la geriatría:

Incontinencia esfinteriana

Incapacidad mental

Inmovilidad

Inestabilidad postural

  • Cuando se autoperciben de su mala salud.
  • Caídas repetitiva.
  • Polifarmacia, recetada y autosuministrada.
  • Consumo de psicofármacos.
  • Externación hospitalaria reciente.
  • Visitas domiciliarias, con frecuencia superior a una, al mes.
  • Dificultad para la deambulación y movilización, dentro y fuera de sus domicilios.
  • Dependencia para las actividades de la vida diaria: comer por sí solo, asearse, usar el retrete y vestirse.
  • Dependencia para la realización de las actividades instrumentales de la vida diaria: cocinar, hacer las compras, manejar el dinero, hablar por teléfono, limpiar su casa.
  • Deterioro cognitivo y facultades mentales disminuidas o alteradas.
  • Depresión y/o ansiedad.
  • Fobias, (no olvidemos que consumen televisión y sobre todo noticieros, donde se muestra ataque a ancianos).
  • ¡Vivir solo!
  • Viudez reciente.
  • Edad mayor de 80 años.
  • Ser mujer.
  • Poca contención familiar.
  • Pobreza.
  • Escasa escolaridad.
  • Ausência o presencia de cuidador o conviviente cuidador informal.
  • Estrés del cuidador.

El modelo propuesto por Buchner es el siguiente:

El envejecimiento fisiológico asociado al estilo de vida, tipos de comportamiento, factores sociales y factores económicos determinan: fragilidad, que se traduce como disminución de la reserva fisiológica, en ésta intervienen  procesos agudos crónicos y “desusos”  -inactividad, inmovilidad, encamamiento, mal nutrición-, lo que determina: incapacidad física.

Los criterios de “dependencia” y “autocuidado” permiten considerar que hay en realidad menos ancianos  frágiles de los que se supone.

No todos los ancianos con algún grado de dependencia son frágiles

Si bien lo arriba anotado da pautas sobre fragilidad, p ej. “no todo anciano recientemente externado es frágil”. El término fragilidad  es dinámico. Depende del lugar en que se lo analice; sea en su domicilio, en una residencia para adultos mayores, en un hospital de crónicos o en un hospital de agudos.

Sería interesante reflexionar sobre lo siguiente:

“las personas  se encuentran en permanente cambio funcional; pueden variar de vigor a fragilidad para luego recuperar su vigor o no”.  (Insistimos en que no todas la personas son frágiles en la misma proporción).

Actualmente –por lo que se desprende, sobre todo, de lo anotado anteriormente-, los factores sociodemográficos  han perdido importancia aunque se les debe de tener en cuenta. También se han de tener en cuenta los factores médicos y fisiológicos.

Aclaro que, si bien ser mujer es indicativo de mayor longevidad, las investigaciones dan por resultado que la mujer que llega a vieja, llega en peores condiciones y con más limitaciones físicas que el hombre.

Vivir solo no es factor de fragilidad pero es predisponente de mayor estrés y depresión.

El factor que si debe ser tenido en cuenta es: la pobreza.

Hasta hace no mucho tiempo era considerado factor de fragilidad el ser mayor de 80 años a pesar de que esa cifra, actualmente, se ha aumentado a los 90 años dejando sentado que todo es individual y único para cada ser.

A día de hoy, se considera que son frágiles los viejos que presentan deprivación sensorial, debilidad muscular y aquellos que tienen que usar servicios sociales comunitarios.

Los autores Campbell y Buchner proponen mensurar la fragilidad desde la perspectiva de medición de:

a) La función aeróbica

b) La función cognitiva

c) Estado nutricional

e) Reserva funcional

Donde consideraremos la fragilidad:

1) afectiva

2) cognitiva, y

3) social

En la actualidad, no se dispone de escalas para medir fragilidad en los ancianos pero no cabe duda que, detectarla, es de vital importancia para tratar sus causas y enlentecer su progresión.

Si valoramos la fragilidad e intervenimos en forma adecuada, podremos evitar la dependencia del anciano incrementando, de este modo, su calidad de vida.

Se traduce en este caso como mejora de la calidad de vida, el no ingreso a instituciones de larga estancia, y que permanezca el mayor tiempo posible en su domicilio.

La evaluación de la fragilidad obviamente es diferente en un medio rural que en un medio urbano donde las escalas de valores son diferentes y existe un mayor nivel de “tolerancia” a fallas cognitivas leves en los medios rurales. Del mismo modo, al decir de Florencio Escardó, no es lo mismo sufrir síndrome de Down en un medio urbano donde se pretenderá que el niño mongólico realice cálculos matemáticos sin tener en cuentas sus capacidades, mientras que en el medio rural, se lo integra a las tareas del campo sin ningún tipo de miramientos obteniéndose de él un rendimiento óptimo. En medios rurales existe una envidiable capacidad de adaptación a la naturaleza donde no se busca modificarla; se la acepta y se obtienen mejores resultados para el presuntamente “deficiente” y su familia. (Deficiente para algunas cosas, no para todas).

 

Bibliografía

  • Ferreld b et all. Geriatric home care. Clinics in Geriatric Medicine .1991
  • Brumel Smith K. Geriatric rehabilitation. Clinics in Geriatric Medicine. 1993
  • Thevenson t et all. Rehabilitation geriatric. España Masson 1995
  • Hartz sc . Nutrition in the elderly. London: Smith-Gordon 2006
  • Steven HW et all. The periodic health examination of older adults: the recommendations of de US preventive services. Task force. J Am geriatric Soc 2010
  • Williams M. The American Geriatrics Society´s complete guide to aging and health Harmony books Is ted. USA 2012.